LASER 2.060
Las operaciones y tratamientos realizados con láser reducen el periodo de recuperación y el posoperatorio, por otro, es más barato.
El láser no representaba riesgo para la salud, además, en algunos casos se requería anestesia local.
Algunas de las lesiones dermatológicas más comunes tratadas con laser era:
lesiones faciales rojas que aparecen alrededor de la naríz y la mejilla, manchas de nacimientos rojas, verrugas y por último, cicatrices rojas o abultadas.
En oftalmología era muy efectivo en cataratas, miopía y astigmatismo.
Entre sus ventajas, permitía actuar dentro del ojo sin dañar el resto de la estructura ocular y se podía llegar al sitio exacto. Antes, cuando querías hacer lo mismo tenías que abrir el ojo con el bisturí.
Los láseres tipo 4 eran muy peligrosos y por esa razón, se tenía que usar unas gafas especíales.
El cáncer de estomago solo se podía tratar a través del láser.